El cupping facial es una terapia de belleza que ha cautivado a celebridades como Kim Kardashian, Jennifer Aniston y Gwyneth Paltrow (Vázquez, 2021). Pero, ¿a qué se debe su popularidad?
Lo que sucede es que es un tratamiento que ilumina la piel y contribuye a eliminar las ojeras y definir el óvalo de la cara. El cupping facial consiste en utilizar pequeños vasos o copas que succionan la piel en donde se colocan. Esto tiene dos efectos: quema oxígeno y hace presión en el rostro. Así, promueve la microcirculación sanguínea, por lo que propicia una reparación de los tejidos (Cao, Z, Jiao, L., Wang, H. et. al., 2021).
Aunque parece un tratamiento nuevo, es una terapia increíblemente antigua y universal que se extendió por lugares como Egipto, Mesopotamia, China, entre otros (Fernández, s.f.). Acompáñanos a descubrir los beneficios de esta práctica.
Así funciona el cupping facial
Por lo general, una sesión de cupping facial dura alrededor de 30 minutos. Es una práctica no invasiva, rejuvenecedora y, sobre todo, relajante. Se trabaja principalmente en el área del escote, cuello y rostro. Cada copa se va moviendo, lo que da como resultado un masaje que propicia la circulación de la sangre y el drenaje de los nódulos linfáticos (Vilanova, 2019).
Los tejidos reciben un suministro nuevo de oxígeno mientras que se eliminan los desechos de las células y otras sustancias nocivas. Esto, a su vez, activa la formación de colágeno y elastina (Vilanova, 2019).
Cualquier producto de belleza utilizado, durante y después del tratamiento, se absorbe de mejor manera y es más efectivo. Además, sus efectos no son solo estéticos: es útil para quienes tienen dolores de cabeza, de oídos y problemas mandibulares (Vilanova, 2019).
Beneficios del cupping facial
El cupping facial puede traerle los siguientes beneficios a tu piel (Vilanova, 2019):
- Como es auxiliar en la reducción de la hinchazón, ayuda a reducir las ojeras.
- Debajo de la piel de la cara hay una red de tejido llamada fascias que proporciona elasticidad y firmeza. Con el cupping se estimula dicha red, lo que ayuda a suavizar las líneas finas y arrugas.
- Lo anterior también propicia que se reafirmen los pómulos y el óvalo facial. Además, es un auxiliar en el tratamiento de cicatrices.
- Con la presión que se realiza, se limpian los poros y se alisa la piel, dándole suavidad, luz y tersura.
- El efecto antiinflamatorio del cupping es una buena opción en caso de acné y rosácea.
ABC para empezar con el cupping
Si quieres comenzar una terapia de cupping facial hay algunas cosas que debes tener en cuenta. Lo ideal es que al principio programes sesiones frecuentes. Pueden ser 1 o 2 por semana durante un lapso de 8 semanas consecutivas. De esta manera, se apreciarán al máximo los resultados (Vilanova, 2019).
En la etapa de mantenimiento, solo requerirás una o dos sesiones por mes. Se comienza limpiando tu piel, siguiendo con una exfoliación ligera para después aplicar aceites benéficos.
Generalmente, se realiza primero un ligero masaje en cara, escote y cuello. A partir de ahí se empieza con la terapia de cupping. Se recomienda, además, beber mucha agua después del tratamiento para una mayor depuración (Vilanova, 2019).
¿Quiénes no deben usar el cupping en la cara?
La succión que se realiza en una terapia de cupping separa diferentes capas de tejido, lo que provoca microtraumatismos y desgarros (Abdur – Rahim, 2018).
Esto desencadena una respuesta inflamatoria inundando el rostro de glóbulos blancos, plaquetas y otros agentes que terminan siendo curativos.
Sin embargo, por el motivo anterior, no se aconseja esta técnica para pieles inflamadas, con erupciones y llagas.
¿Quién puede aplicar el cupping?
El cupping está dentro de las llamadas terapias alternativas (Fernández, s.f.). Por ese motivo, cualquier persona que haya tomado un curso, con un local abierto al público, puede aplicarlo.
Sin embargo, los fisioterapeutas lo suelen usar dentro de sus técnicas. También puede ser aplicado por acupunturistas y personas que se especializan en el rejuvenecimiento facial (Abdur – Rahim, 2018).
Sin embargo, la recomendación siempre es buscar lugares confiables y con referencias.
¿Se recomienda el cupping facial casero?
Ciertamente en el mercado existen kits para hacer cupping facial en casa (Abdur – Rahim, 2018). No es que esté mal que lo hagas así, pero acudir con un profesional tiene varios beneficios:
- Es posible que te resulte más fácil relajarte si alguien más te hace el tratamiento.
- El que otra persona aplique las copas podría permitir que la presión sea más uniforme.
- Ir con un profesional te asegurará que se sigue la técnica adecuada.
- Si realizas por tu cuenta el cupping podrías provocarte moretones no deseados mientras perfeccionas la técnica.
Si de cualquier manera decides hacerlo por tu cuenta, no olvides trabajar sobre la cara limpia y usar aceites faciales.
Como pudiste leer en este artículo, el cupping es una técnica no invasiva que lleva muchos años acompañando a la humanidad. Sus efectos son acumulativos y una sesión te podría ayudar a relajarte. Con todos estos motivos, no esperas más para probarla. Te invitamos a que sumes esta técnica a tus demás cuidados para fortalecer la piel.